El lunes 15 de enero, se iniciaba en la escuela de Educación Infantil una nueva aventura con la visita de Árchibal, un juglar procedente de Manzanares del Real, que perdió la memoria y no sabe cómo regresar a su castillo.

Árchibal anima las fiestas, en el castillo del señor de Mendoza y Doña Inés, con su guitarra junto con los bufones y malabaristas del reino. Nos relató que en su castillo un tal Godofredo fue conducido a la mazmorra tras robar un pollo y fruta, por el guardián del puente levadizo que está situado en la puerta principal.

Herreros, cocineros y artesanos celebran un mercado todos los jueves donde se pueden adquirir productos por unos pocos dinares. Los herreros hacen escudos, espadas, arcos, etc. Los puestos de comida venden guisos propios de la Edad Media. También nos habló de la torre del homenaje y de cómo un día vino un mago llamado Merlín a leer uno de los incunables de Mendoza, libros hechos por unos monjes en las cercanías de Manzanares en un sitio llamado El Escorial. Recordó que el juego preferido es el ajedrez: un juego de torres, obispos, reyes, reinas, caballos y caballeros (peones).

Nos comentó que a veces un dragón llamado Segmund, de color verde o azul (no recuerdo), se llevaba vacas y frutas para comer y que los habitantes del castillo cuando venía se encerraban temerosos y se protegían tras las almenas.

A Árchibal no le gustan los ratones que habitan en el castillo ya que se comen los sacos con el trigo y el maíz y luego el panadero no tiene harina con la que hacer pan.

A finales de marzo en el interior del castillo se celebra una fiesta que se llama torneo y después los habitantes se sientan en una mesa comen, beben, escuchan a los juglares y se ríen con las bromas de los bufones.

Un día un caballero templario, maese Pedro, llegó al castillo contando historias de países muy lejanos.

Árchibal no sabe que ha viajado en el tiempo y que ahora nada es igual. Se sorprendió al ver las mesas y las sillas de las aulas fabricadas con un material desconocido para él llamado plástico. Necesita recuperar su memoria para regresar a su lugar. Nos pareció que podríamos ayudarle transformando nuestra escuela en un castillo.